{"id":75,"date":"2017-12-21T14:59:43","date_gmt":"2017-12-21T14:59:43","guid":{"rendered":"https:\/\/laperiodica.net\/?page_id=75"},"modified":"2018-01-29T20:22:31","modified_gmt":"2018-01-29T20:22:31","slug":"de-vuelta-a-tus-patines-pequena-emilia","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/laperiodica.org\/antiguo\/de-vuelta-a-tus-patines-pequena-emilia\/","title":{"rendered":"De vuelta a tus patines, peque\u00f1a Emilia"},"content":{"rendered":"
Cristina Burneo Salazar<\/div>\n

…vernos m\u00e1s viejos.<\/cite>
y avergonzados.<\/cite>
porque ya no est\u00e1s aqu\u00ed.<\/cite>
porque no pudimos.<\/cite><\/p>\n

— Karina Mar\u00edn<\/p>\n

\n

Lo escuchamos hasta que se vuelve insoportable: \u201cLas autoridades dan cuenta de lo ocurrido: lamentan tener que dar la terrible noticia.\u201d Vemos dispuestas con banderas las mesas de rueda de prensa del Ministerio del Interior: \u201cDesde el primer momento realizamos todas las tareas de b\u00fasqueda con todas las unidades. Se activaron todos los dispositivos de seguridad para dar con la menor\u201d. La Direcci\u00f3n Nacional de Delitos Contra la Vida, Muertes Violentas, Desapariciones, Extorsi\u00f3n y Secuestros (DINASED<\/span>) da muestras del trabajo realizado: \u201cEra profesor, daba clases de educaci\u00f3n f\u00edsica. Aprovechaba la cercan\u00eda y relaci\u00f3n de amistad con las familias y las ni\u00f1as para cometer este delito, lamentablemente.\u201d Lamentamos tener que informar. Nada de esto es suficiente, y nos limitamos a pensar que es todo lo que hay. Que hacer justicia es devolver un cuerpo.<\/p>\n

Y la prensa: \u201cEsta es la v\u00eda que conduce hasta Chuquiribamba. En este sector fue encontrado el cuerpo sin vida de Emilia Benavides Cuenca, la menor que desapareci\u00f3 hace cinco d\u00edas luego de haber salido de su establecimiento educativo. Inform\u00f3 Noticiero Uno.\u201d <\/p>\n

Cientos de veces: denuncias de desapariciones y un rostro que se vuelve cada vez m\u00e1s familiar cuando una ni\u00f1a o una mujer ha desaparecido o ha sido asesinada, un rostro com\u00fan que es el de la ausencia, y su foto, casi siempre, como anuncio de su muerte. El mismo protocolo cientos de veces: \u201cHemos activado todos los dispositivos\u201d, \u201ceste crimen no quedar\u00e1 en la impunidad\u201d. \u00bfC\u00f3mo puede ser posible que el \u00fanico acto de justicia para Emilia haya sido hallar su cad\u00e1ver? El \u00fanico acto de justicia que nos queda: sacar un cuerpo de una quebrada. <\/p>\n

Ante el r\u00e9gimen femicida en que vivimos, colectivos del movimiento de mujeres se han dado a la tarea de recoger datos de feminicidios de la prensa, del Estado y de denuncias de familias. Hay que detenernos a pensar en lo siniestro de esta tarea: ya no basta el duelo por nuestras muertas, tenemos que contar sus asesinatos, ponerlos en cuadros y procesarlos como datos porque se ha vuelto inenarrable, porque no son casos aislados, porque esos cuadros sombr\u00edos que elaboramos son nuestro espejo: una sociedad que hace todo para no admitir que se levanta sobre vidas de segunda clase, que son las vidas de las mujeres y de las ni\u00f1as. Elaborar cuadros y mapas porque no nos creen, y sobre nuestras muertes, construir un archivo. \u00bfAhora nos creen?<\/p>\n

Organizaciones sociales y colectivos feministas trabajan en colaboraci\u00f3n permanente para listar los feminicidios con el fin de hacerlos visibles en mapas, textos y acciones. Hemos tenido que llegar a esto: listar sin fin para probar que nos est\u00e1n matando. Tenemos mapas de asesinadas por ciudad, por provincia, por edad. Ge\u00f3grafas, activistas feministas, abogadas, dedican su trabajo a defender lo que nos ha sido negado: denunciar que hay un orden que tolera y encubre nuestras muertes. Estas organizaciones informan que al 21 de noviembre de 2017 ha habido m\u00e1s de 140 feminicidios reportados [1]<\/a>. Tres ni\u00f1as anteceden a la peque\u00f1a Emilia: Evelin Carolina, la m\u00e1s peque\u00f1a ten\u00eda, 11 meses cuando fue asesinada por su padre, que en realidad intentaba asesinar a su madre. Feminicidio por conexi\u00f3n. Tres ni\u00f1as aparte de Emilia que no ser\u00e1n las \u00faltimas. M\u00e1s ni\u00f1as ser\u00e1n asesinadas, secuestradas para redes de pornograf\u00eda de menores o de prostituci\u00f3n, o ser\u00e1n violadas por sus t\u00edos, primos, padrastros, padres, hermanos, abuelos, profesores. Y seguiremos pensando que la \u00fanica justicia que nos corresponde es que sus cuerpos nos sean entregados sin vida. <\/p>\n

Dentro del feminismo, la plataforma Justicia para Vanessa se volvi\u00f3 un puntal de Vivas Nos Queremos; la Red de Familias de Cuenca organiz\u00f3 su duelo en torno al asesinato de Cristina Palacio y logr\u00f3 que otras familias pudieran unirse para defender la memoria de sus hijas; madres de j\u00f3venes asesinadas como Yadira Labanda, Ruth Montenegro, Jannet Ca\u00f1izares, se han vuelto s\u00edmbolos de lucha por la memoria y contra la violencia de g\u00e9nero. La hija de Ruth, la peque\u00f1a Valentina Coss\u00edos Montenegro, era apenas mayor que Emilia Benavides. Fue asesinada dentro de su escuela hace 18 meses. El Ministerio de Educaci\u00f3n dijo que no era su problema: los ministros Augusto Espinosa y Freddy Pe\u00f1afiel se lavaron las manos. Valentina fue hallada con signos de abuso sexual. <\/p>\n

El colectivo Sentimos Diverso acompa\u00f1\u00f3 a los padres y madres de AAMPETRA<\/span>, cuyos hijos e hijas hab\u00edan sido torturados y violados dentro de su propia aula en el colegio. El rector sigue en funciones. En su escuela, un aula se mantuvo por 11 meses con cortinas cerradas porque un profesor comet\u00eda all\u00ed actos de sadismo. Apenas logramos dimensionar estas violencias y no sabremos erradicarlas mientras no reconozcamos que son el cimiento de un status quo: se llama patriarcado y mantiene activa una forma de asesinato selectivo que se llama feminicidio. <\/p>\n

\u201cEn 27 pasos que hay de la puerta de la escuela a la parada de bus, el asesino se ha llevado a toda una familia. Hay cinco portales de la escuela a la esquina de la parada. Es un per\u00edmetro muy familiar, fue el per\u00edmetro de mi propia infancia. El asesino llev\u00f3 a Emilia por nuestro barrio, donde ella tambi\u00e9n viv\u00eda, pasaron por la puerta de su antigua casa. Esta ni\u00f1a iba en calentador y era la inocencia personificada. \u00bfA qu\u00e9 le van a echar la culpa? En 27 pasos se ceg\u00f3 una vida a mediod\u00eda, a la salida de una escuela.\u201d Leo esto que escribe Bernardita Maldonado, quien conoc\u00eda a Emilia, y veo las capturas de c\u00e1mara que muestran a Emilia caminando junto a su asesino. Bernardita hace memoria y estremece: la muerte nos ronda cada vez m\u00e1s cerca, es una muerte encarnada en violadores, femicidas, parejas, ex parejas, traficantes de ni\u00f1as, conscientes de la impunidad con que pueden vivir. No son monstruos, o el monstruo, m\u00e1s bien, vive entre nosotros y lo alimentamos. \u201cEstas calles nos las hab\u00edamos ganado venciendo al miedo me escribe Bernardita. Primero les tuvimos miedo a los borrachos de la zona, despu\u00e9s, a los conscriptos que sal\u00edan los domingos. Siempre hemos estado asustadas en nuestra propia ciudad.\u201d<\/p>\n

Bernardita recuerda la \u00faltima foto que vio de Emilia y su risa. Llevaba unos patines que le hab\u00edan dado de regalo. Ahora, los patines est\u00e1n vac\u00edos. \u201cEra una fiesta o\u00edr la risa estruendosa de la hermana mayor de Emilia, y cuando se juntaban todas las ni\u00f1as era la felicidad verlas re\u00edrse. Se sentaban en una estera en la terraza de mi casa a contarse sus travesuras\u201d. La hermana de Emilia tampoco puede re\u00edrse ya, ni su familia, ni sus compa\u00f1eros de escuela, que le hab\u00edan hecho huelga a la directora por quedarse sentada en su oficina en lugar de salir a buscar a la ni\u00f1a. Cu\u00e1ndo volver\u00e1n a re\u00edrse esos ni\u00f1os viendo la silla vac\u00eda de Emilia. <\/p>\n

No nos resignamos a que la justicia se reduzca a devolvernos en bolsas los cuerpos de nuestras muertas, porque no deber\u00edan haber sido asesinadas. No nos resignamos a la eficacia de los protocolos de b\u00fasqueda, porque ellas no deber\u00edan haber desaparecido. No nos resignamos a que eso se llame justicia, porque justicia de verdad ser\u00eda que no tuvi\u00e9ramos miedo de vivir en el mundo. No nos resignamos a que la \u00fanica reparaci\u00f3n sea endurecer las penas, porque la prisi\u00f3n apenas simula que la violencia est\u00e1 contenida. No nos resignamos a que se clame por la pena de muerte para los femicidas, porque una muerte no deshace otra muerte. No nos resignamos a que el Estado use a los femicidas capturados como trofeos, porque tendr\u00eda que ser el Estado el primero en desmontar ese circo de justicia que no nos da m\u00e1s que sus f\u00f3rmulas de expiaci\u00f3n: \u201clamentamos informar\u201d. No nos resignamos a que el sacerdote d\u00e9 una misa para que nuestras muertas descansen en paz, porque no van a descansar ni ellas ni descansaremos nosotras mientras no se desmonten estas violencias que atravesamos todos los d\u00edas. No nos resignamos a que la escuela, la familia o el amor sean el lugar donde vamos a encontrar la muerte. Otro tiene que ser el amor de pareja, que no mate, otra tiene que ser la familia, que no disimule la violencia, otra la escuela y otros los caminos que caminamos. Entre la puerta de la escuela y la parada de bus hab\u00eda s\u00f3lo 27 pasos. Esos pasos no deber\u00edan ser mortales. Ninguna plegaria nos salva, ninguna resignaci\u00f3n. Tus pasos ten\u00edan que llevarte de vuelta a tus patines, peque\u00f1a Emilia, no al vac\u00edo, y no supimos abrirte otro camino. <\/p>\n

[1]<\/a> Lista proporcionada por Geograf\u00eda Cr\u00edtica a partir de datos elaborados en colaboraci\u00f3n entre Red de Casas de Acogida, CEDHU<\/span>, Fundaci\u00f3n Aldea y Taller de Comunicaci\u00f3n Mujer. <\/p>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":"

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